Capítulo 3: Parte 9



- ¡Menos mal!- Gritó aliviada Rebeca a mi lado. Mi mirada fue adquiriendo mayor enfoque hasta que me di cuenta de que estaba tendida en el césped. Primero vi a mi tía agarrándome la mano, y luego fruncí el ceño al ver a Leo.- ¿Qu..?- Pero mi garganta estaba ardiendo.

- ¡lo siento muchísimo Emily!- Exclamó Cristina detrás suya.- ¡casi te ahogas muchacha!- Me soltó su padre como si estuviera regañándome. "Sí, y tu hija tiene la culpa" Mi mirada acusatoria hacía Cristina pareció bastarle. "¿Pero quien me había salvado?" estaba preguntándome mientras analizaba la información. El recuerdo... ¿o fue un sueño? Mi mirada se perdió en el lago, buscando una señal de que lo que había soñado fuese real.

- Por suerte mi cuñado estaba nadando por allí y te salvó.- Explicó Sonia al percatarse de mi confusión. Observé durante un segundo a Leo y vi que él también estaba muy preocupado por mí. Después traté de levantarme pero todo me dio vueltas.

- Quédate tumbada aún- Pero no quería. Necesitaba moverme. Tenía demasiadas preguntas en la cabeza. Preguntas sobre su conversación, sobre el extraño recuerdo que acababa de tener, sobre lo que vi en el lago (aunque aún no sabía muy bien qué había visto).... Y mi intuición me decía que ninguno de ellos estaba dispuesto a contestármelas.

***

Convencí a Rebeca de no irnos a casa y me quedé tumbada sobre el césped. En la sombra y abastecida de botellas de agua para recuperar mi garganta dolorida. Cristina decidió quedarse a mi lado movida por la culpa. Al mismo tiempo sus padres y Leo se trasladaron a donde estábamos nosotras. Ahora estaban los cuatro hablando animadamente lejos de nosotras. En la orilla del lago.

- ¿De qué hablaran?- Murmuré con la poca voz que me quedaba.- Ni idea, de cosas aburridas. Seguro.- Respondió Cristina, aunque en realidad había sido una pregunta más para mí misma que para ella.- Por cierto ¿Quién es Meriem?- La miré sorprendida por su pregunta.- Es lo primero que has dicho al despertar... - Aclaró al ver mi cara de desconcierto. - Bueno, supongo que todavía estarías inconsciente y no te acuerdas.- Se encogió de hombros sin darle importancia. - Aunque mi tío ha puesto una cara muy rara cuando lo has dicho...- No sabía si seguía hablando conmigo o consigo misma. Pero que Leo hubiese reaccionado ante la mención de ese nombre podría significar que mi sueño sí que era real.-  Vaya, Vaya... que tenemos ahí.- Dijo señalando a una pareja que estaban en algún punto dentro del agua.- ¿Quiénes son?- Me ayudó a incorporarme un poco y entonces me di cuenta de que eran Ruth y Jordi.

- ¿Te molesta?- Inquirí mirándola con atención.- ¿A mí? ¡Qué va! Ya te he dicho cual es su propósito- Sin embargo no sonaba muy convencida.- Deberías decirle la verdad. No es justo para ella.- Le aconsejé pero no dijo nada más.- Solo es un capricho... si realmente le gustase se lo diría.- Intentó quitarle hierro al asunto pero no pudo evitar seguirlos con la mirada. 

Ruth y Jordi estaban nadando juntos en el lago. A veces él la atraía hacía su pecho y le robaba algún beso mientras se reían.- Ahora vengo.- Dijo justo cuando los dos estaban saliendo del agua.- ¿Qué vas ha hacer?- Pregunté al intuir sus malas intenciones.- Demostrarte que tengo razón.

Si quieres descubrir más sobre esta novela online ¡Sígueme y no te pierdas ningún capítulo!

Comentarios

Entradas populares de este blog

Capítulo 5: Parte 1

Capítulo 2: Parte 2